César Urbano Taylor: ¿Quieres disfrutar del ciclismo de montaña? Estos consejos son para ti
El ciclismo de montaña es un deporte sumamente exigente y que coloca la adrenalina a millón. No está libre de riesgos, pero ese es uno de los ingredientes que hace que sea más divertido, y si a eso le sumamos la posibilidad de interactuar con la naturaleza y de exigirnos físicamente, se convierte en la escapatoria perfecta para salir de la rutina.
Para disfrutarlo al máximo, debemos tener presente ciertos factores. A continuación, te presentamos algunos de ellos:
Bajadas:
Las bajadas representan una de las partes más emocionantes, exigentes y peligrosas de nuestros recorridos. Si eres un novato, debes primero acumular kilómetros de experiencia en ellas para que aprendas a identificar el comportamiento de tu bicicleta en cada terreno. Mantén la concentración en el camino y usa una posición adecuada. Distribuye tu peso en la bicicleta y ajusta los frenos según te sientas más cómodo para una mejor frenada.
Cambios:
Realiza los cambios de velocidades en tu bicicleta de manera frecuente, estos están para ser usados. De esta manera, evitaras lesiones y aprovecharas mejor tu energía. Anticipa y cambia de marcha en el momento justo antes de iniciar una subida, esto te ayudará a mantener una cadencia buena y a no formar el mecanismo. Evita las combinaciones de plato grande con piñón grande y plato pequeño con piñón pequeño., esto se conoce como cruzar la cadena, y hacerlo estira la cadena y daña las marchas.
Las trialeras:
Cuando ya tienes experiencia en los descensos, o buscas mayor emoción, puedes aventurarte por nuevos caminos, estos pueden tener mayor cantidad de obstáculos. Por ello, es importante que te adecues a estas condiciones. Lo ideal en este tipo de caminos es que elijas una buena trazada, que muchas veces puede no verse a simple vista. La velocidad no debe ser muy lenta, ni tampoco debes abusar del uso del freno delantero. Procura mantener tu cuerpo lo suficientemente suelto para que tus brazos y piernas actúen como mueves y no estés vibrando completamente.
Por César Urbano Taylor
